“Las últimas dos piezas legislativas ante mí amplían la capacidad de la Ciudad para proveer incentivos a fin de impulsar los proyectos Mitchell-Lama para que sigan siendo una fuente de vivienda asequible.  La Ley Preliminar Número 203, patrocinada a solicitud de nuestra Administración por los concejales Dilan, Gonzalez, Martinez, McMahon, Stewart, Seabrook, Lappin, Vacca, Palma, Recchia, Garodnick, White, Gentile, Dickens, Sears y Weprin, permite a los proyectos Mitchell-Lama ser elegibles para el beneficio fiscal J-51 aunque el trabajo de renovación necesario para recibir el beneficio sea financiado con una subvención, préstamo o subsidio de una entidad federal, estatal o local.

“El programa de beneficios fiscales J-51, administrado por el Departamento de Preservación y Desarrollo de la Vivienda (HPD, en inglés), es un programa de incentivos fiscales que proporciona beneficios reales en impuestos a la propiedad para propietarios de múltiples viviendas que rehabiliten o reemplacen grandes sistemas en toda la edificación tales como las calderas, techos y elevadores. 

“En la actualidad, solo un proyecto Mitchell-Lama que reciba una préstamo de rehabilitación con financiamiento privado puede beneficiarse de la exención J-51.  Esta ley amplia esta restricción al extender también esta exención impositiva a propietarios que reciben préstamos de rehabilitación con intereses bajos del gobierno.  Para ser elegibles para tal beneficio fiscal, los propietarios deben permanecer en el programa Mitchell-Lama durante quince años adicionales.  Esta legislación crea un fuerte incentivo para rehabilitar múltiples viviendas a la vez que asegura que los proyectos sigan siendo una fuente de vivienda asequible.

“La Ley Preliminar Número 204, patrocinada a solicitud de nuestra Administración por los concejales Dilan, Gonzalez, Martinez, McMahon, Seabrook, Lappin, Palma, Recchia, Garodnick, White, Gentile, Dickens, Sears y Weprin, rectifica una referencia legislativa estatal arcaica que prohibía a las cooperativas recibir beneficios J-51 si su valor evaluado excedía los $30,000 por unidad de vivienda.  En 1992, este límite se incrementó a $40,000.  Esta prohibición ha sido inadecuada por mucho tiempo, ya que el valor evaluado de una unidad Mitchell Lama no refleja el valor del apartamento.  Debido al aumento en los valores evaluados, en la actualidad más de 4,300 unidades de cooperativas Mitchell-Lama son evaluadas en más $40,000 por unidad.  Esto se debe a los crecientes valores de las propiedades en sectores en los cuales se ubican las cooperativas Mitchell-Lama.  A pesar de los valores evaluados más altos, los proyectos siguen siendo un recurso vital de viviendas asequibles que necesitamos preservar.

“La Ley Preliminar Número 204 realiza una importante corrección al permitir que miles de unidades cooperativas Mitchell-Lama puedan aprovechar el programa J-51 por primera vez cuando rehabiliten sus propiedades sin importar el valor evaluado de las mismas.  Esta pieza también requiere que los proyectos permanezcan en el programa Mitchell-Lama durante quince años desde la fecha del beneficio.

“Tanto la Ley Preliminar Número 203 como la 204 ayudarán a mantener el inventario de viviendas asequibles de la Ciudad de Nueva York al impulsar rehabilitaciones muy necesarias con tasas de interés más bajas que las del financiamiento del sector privado, evitando a la vez que más proyectos abandonen el programa Mitchell-Lama.

“Quiero agradecer al comisionado del Departamento de Preservación y Desarrollo de la Vivienda Shaun Donovan y su personal por su labor en estas piezas.  También quiero agradecer al Concejo por aprobar esta legislación”.