El alcalde Michael R. Bloomberg, la vicealcaldesa de Salud y Servicios Humanos Linda I. Gibbs y el Dr. Thomas A. Farley, comisionado del Departamento de Salud e Higiene Mental (DOHMH, en inglés), anunciaron hoy que, superando cifras nacionales, los neoyorquinos están disfrutando vidas más prolongadas que nunca.  Bajo la influencia de las audaces iniciativas de salud pública de la Ciudad de Nueva York y mejoras en la calidad del sistema de prestación de servicios de salud, los bebés nacidos en 2009 tienen una expectativa de vida récord de 80.6 años, un aumento de casi tres años desde 2000 y casi dos años y medio más que el más reciente promedio nacional reportado de 78.2 años.  Desde el año 2000 a 2009, la expectativa de vida para los neoyorquinos de 40 años de edad creció en 2.5 años (de 79.5 a 82 años), sustancialmente mayor que el incremento de 1.2 años para el mismo grupo de edad en todo el país.  A la vez, la expectativa de vida para las personas de 70 años en la Ciudad creció en 1.5 años, comparado con 0.7 año para la nación.  La expectativa de vida en la Ciudad no solo superó el promedio nacional, sino que mejoró más rápido que cualquier otra ciudad grande, tanto para las mujeres como para los hombres.  Las intervenciones de salud de la Ciudad ― incluso sus programas para dejar de fumar y la ampliación de las pruebas y tratamiento contra el VIH ― han contribuido a este éxito; la mejora en los resultados para la infección del VIH (o SIDA), cardiopatías y prevención y tratamiento del cáncer han desempeñado el rol más preponderante en el incremento de la expectativa de vida.  Los logros anunciados hoy por el alcalde Bloomberg, la vicealcaldesa Gibbs y el Dr. Farley no incluyen mejoras futuras en las ciencias médicas.  El alcalde realizó el anuncio en el ala de maternidad del hospital Lincoln, donde nacieron 2,574 bebés durante el año 2010, y le acompañaron el senador estatal José M. Serrano, el subdirector ejecutivo del hospital William Hicks, y su directora médica, la Dra. Melissa Schori.

“Si usted quiere vivir más y más sano que el estadounidense promedio, entonces venga a la Ciudad de Nueva York”, dijo el alcalde Bloomberg. “Al invertir en atención médica y seguir motivando a más neoyorquinos a encargarse de su propia salud, hemos experimentado mejoras drásticas en la expectativa de vida.  Esta noticia realmente nos trae un feliz y sano Año Nuevo”.

“Los residentes de la Ciudad de Nueva York están más sanos que nunca”, dijo la vicealcaldesa Gibbs.  “Un aire más limpio, calles más seguras, alimentos más sanos ― todos estos contribuyen a una mejor calidad y más años de vida.  Esto ha sido el fruto de las ideas creativas y la implementación firme en muchas agencias de la Ciudad”.

“Menos neoyorquinos está muriendo la enfermedad del VIH y enfermedades relacionadas con el hábito de fumar”, dijo el comisionado de Salud Dr. Thomas Farley.  “Las personas con infección del VIH están cada vez más siendo identificadas con la ampliación de pruebas, y se están poniendo avances en el tratamiento de la infección del VIH a la disponibilidad de todo el que tiene el virus más rápidamente.  Desde 2002, casi medio millón de neoyorquinos han dejado de fumar y reducido drásticamente su riesgo de enfermedades cardíacas y cáncer a causa del tabaco.  Seguiremos trabajando para que la Ciudad de Nueva York tenga un ambiente más sano, mejorando la expectativa y también la calidad de vida de los neoyorquinos”.

“Como el sistema de salud pública más grande de la nación, que da servicio a uno de cada ocho neoyorquinos y realiza una cuarta parte de los partos en la ciudad, la Corporación de Salud y Hospitales ha desempeñado un dol crítico para hacer de Nueva York un lugar más sano donde vivir”, dijo el presidente de la entidad municipal Alan Avilés.  “Nuestras inversiones en atención primaria y preventiva, y nuestras intervenciones de salud pública enfocadas en ayudar a los pacientes a controlar sus aflicciones crónicas están posibilitando que más y más neoyorquinos conserven su salud y vivan más”.

“El alcalde Bloomberg ha tomado consistentemente conocimiento sobre la prevención del cáncer y lo ha convertido en una política efectiva”, dijo Donald Distasio, CEO de la Sociedad Americana del Cáncer (ACS, en inglés) en Nueva York y Nueva Jersey.  “Los programas que han priorizado el acceso a pruebas de cáncer, requerido información sobre las calorías en los restaurantes, liberado a nuestros bares y restaurantes del humo del tabaco y ofrecido parches de nicotina gratis dan a los neoyorquinos las herramientas que necesitan para vivir más.  Seguramente no es una sorpresa que el mismo año en que nuestra ciudad ha alcanzado marcas para las tasas de fumadores, también hemos alcanzado marcas en la expectativa de vida.  El alcalde debe ser aplaudido por sus políticas y los resultados en la prolongación de vidas”.

De 2000 a 2009, la expectativa de vida al nacer en la Ciudad de Nueva York creció casi 3 años, mucho más que el incremento nacional de casi 1.5 años.  La expectativa de vida aumentó tanto para los hombres (78 años) como para las mujeres (83 años).  La tasa de mortalidad en el año 2010 cayó a una marca histórica de 6.4 muertes por cada 1,000 neoyorquinos.  Esto representa un declive de 13.5 por ciento  comparado con 7.4 muertes por cada 1,000 personas en 2002.  En 2009, la expectativa de vida para una persona de 40 a 49 años en la Ciudad de Nueva York era de 82 años, comparado con 80.1 para todo el país, mientras que la expectativa de vida para una persona de 70 a 79 años en la Ciudad de Nueva York fue de 86.9 años, comparado con 85.1 años como promedio nacional.

El Departamento de Salud analizó data de actas de defunción y determinó que mejoras en la prevención y el tratamiento de estas enfermedades y aflicciones fueron los mayores contribuyentes al aumento en la expectativa de vida.  Se incluyen tendencias recientes hasta finales de 2010 en tasas de mortalidad para estas aflicciones en orden de importancia.

Enfermedad relacionada con la infección del VIH – Una identificación y tratamiento tempranos de la infección del VIH ha reducido en gran medida el SIDA y la mortalidad asociada al VIH.  El índice de mortalidad por la infección del VIH está en declive más rápido que otras causas de muerte en la Ciudad de Nueva York (11.3 por ciento desde 2009 y 51.9 por ciento desde 2002).

La Ciudad de Nueva York ha encabezado la marcha en intervenciones de salud del VIH; la Corporación de Salud y Hospitales ― la entidad más grande de atención primaria de VIH en la Ciudad de Nueva York ― empezó a ofrecer pruebas del VIH como parte del cuidado médico básico cinco años antes que el Estado de Nueva York requiriese que los médicos la hicieran.  La iniciativa municipal “The Bronx Knows” (“El Bronx sabe”) se dedica a realizar pruebas del VIH en el condado entero, está colaborando con organizaciones comunitarias y ha realizado más de 600,000 pruebas en tres años; “Brooklyn Knows” (“Brooklyn sabe”) ha administrado casi 115,000 exámenes en solo un año que han permitido a personas desde Williamsburg a Coney Island conocer su situación en términos del VIH.  Desde el 2005, la Corporación de Salud y Hospitales diagnosticó a 10,700 individuos como VIH-positivos, y vincularon y retuvieron a miles en atención básica para el VIH, mejorando su salud y la salud de la comunidad.

Más neoyorquinos que nunca se están haciendo la prueba, y los que tienen un diagnóstico positivo están entrando más rápidamente en tratamientos, con atención y tratamientos más sistemáticos; más de 90 por ciento de los pacientes que resultaron ser positivos en los centros de la Corporación de Salud y Hospitales son conectados antes de  90 días de ser diagnosticados con atención médica y tratamiento contra el VIH que les salvará la vida.  Solo en el año fiscal 2011, las instalaciones de la Corporación de Salud y Hospitales hicieron la prueba a más de 195,516 pacientes — más de tres veces el número que recibió la prueba solo seis años antes ― y la data preliminar indica que menos de 3,500 nuevos casos de VIH fueron diagnosticados en la Ciudad de Nueva York en 2010, una reducción de más de 30 por ciento a comparación del 2002.

Enfermedades cardíacas y cáncer – Las muertes a causa de cardiopatías han bajado en 27.9 por ciento desde 2002.  Esta drástica reducción se atribuye, en parte, a una reducción de 35 por ciento en el número de fumadores desde 2002, y en parte a mejoras en la atención para personas con hipertensión, colesterol alto o cardiopatía.  En general, las tasas de cáncer han caído en 4.3 por ciento desde 2002 (de 170.2 a 162.9 muertes por cada 100,000 personas en el 2010).

Los esfuerzos del alcalde contra el hábito de fumar (incluyendo las impactantes campañas educativas de salud pública, cambios en legislación tales como la Ley del Aire Sin Humo (Smoke-Free Air Act, en inglés) del 2002 e impuestos sobre los cigarrillos, y la línea telefónica para dejar de fumar 311 Quit-line) han producido el más bajo índice de fumadores de la Ciudad en 2010, con solo 14 de 100 neoyorquinos que continúan fumando.  De 2001 a 2010, el hábito de fumar ha caído drásticamente en los adolescentes, con una reducción a más de la mitad en el número de estudiantes de secundarias públicas que fuman (de 18 a 7 por ciento).

Muertes relacionadas a las drogas – El número de muertes causadas por sobredosis de heroína, cocaína, crack y otras drogas ilícitas ha caído desde 2002.  Entre las personas de 15 años de edad o mayores, la tasa de mortandad a causa de una sobredosis involuntaria de droga bajó a 9 muertes por cada 100,000 en el 2010, una reducción de un 24 por ciento desde el 2002.

Mortalidad infantil – Las tasas de mortandad infantil han disminuido, lo cual indica que ahora las madres están más saludables y tienen mejor atención obstétrica y pediátrica.  En 2010, el índice de mortandad infantil en la Ciudad cayó a un nivel histórico de 4.9 muertes por cada 1,000 nacimientos vivos — la tasa más baja desde 1898, cuando los cinco condados fueron unidos y formaron la moderna Ciudad de Nueva York.  Esta mejora sobrepasó la meta municipal de Take Care New York de reducir la mortandad infantil a 5 muertes por cada 1,000 nacimientos vivos para 2012, y también la meta para el 2020 de Personas sanas del Departamento federal de Salud y Servicios Humanos (U.S. Department of Health and Human Service, en inglés) de 6 muertes por cada 1,000 nacimientos vivos.

El Departamento de Salud trabaja en muchos frentes ayudando a las mujeres a conservar la salud tanto como sea posible antes del embarazo, a obtener atención médica de calidad, y a que se les provea el cuidado y apoyo que sus bebés necesitan para prosperar.  Por ejemplo, esfuerzos municipales tales como las políticas de aire sin humo y campañas educativas para reducir el índice de fumadores han contribuido a una drástica reducción en las mujeres fumadoras, de 19.8 por ciento en 2002 a 12.2 por ciento en 2010.  Los programas para mejorar el acceso a comidas sanas también contribuyen a un impacto positivo en los hábitos alimenticios de las mujeres.  Las iniciativas clave de maternidad de la agencia incluyen la educación sobre la lactancia, cómo dormir de manera segura, provisión de cunas para familias que no tienen dinero para comprar una, y visita a sus casas de una enfermera durante el embarazo y la infancia.

A pesar de este progreso, las enfermedades cardíacas, el cáncer y la influenza/neumonía continúan siendo las primeras tres causas de muerte, seguidas por las enfermedades pulmonares y la diabetes, y 30 por ciento de todas las muertes en la Ciudad de Nueva York ocurren antes de los 65 años de edad, con más de 15,000 neoyorquinos que mueren prematuramente.

El Resumen anual de estadísticas vitales (Annual Summary of Vital Statistics, en inglés), el reporte anual de nacimientos y muertes en la Ciudad de Nueva York del Departamento de Salud, es compilado por el Buró de Estadísticas Vitales de la agencia.  Las estadísticas más al día están disponibles haciendo una búsqueda de “2010 Vital Statistics” en nyc.gov.  Resúmenes de las Estadísticas vitales que datan hasta 1961 también están disponibles en ese sitio Web.  Para información sobre actas de nacimiento o de defunción, por favor visite nyc.gov o llame al 311.