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PR- 120-11
13 de abril de 2011

EL ALCALDE BLOOMBERG ANUNCIA QUE LOS ÚLTIMOS RESULTADOS DE ESTUDIO DEL DEPARTAMENTO DE SALUD MUESTRAN QUE EL AIRE EN TIMES SQUARE ES MÁS LIMPIO Y MÁS SANO DESDE APERTURA DE PLAZAS PEATONALES

El informe de PlaNYC muestra una reducción en contaminantes nocivos que pueden irritar los pulmones, empeorar el asma y enfisemas e incrementar el riesgo de muertes prematuras

El alcalde Michael R. Bloomberg, el comisionado del Departamento de Salud e Higiene Mental (DOHMH, en inglés) Dr. Thomas Farley, la comisionada del Departamento de Transporte (DOT, en inglés) Janette Sadik-Khan y el director de la Oficina de Sustentabilidad David Bragdon publicaron hoy los resultados del más reciente estudio de Salud sobre la caldiad del aire, mostrando el impacto del tránsito en la contaminación del aire en vecindades de toda la Ciudad de Nueva York.  El reporte muestra una mejoría inmediata y sustancial en la calidad del aire en Times Square tras la creación de plazas peatonales en el área.  Los datos forman parte del último informe del Estudio del aire en comunidades de la Ciudad de Nueva York (NYC Community Air Survey o NYCCAS, en inglés), un sondeo exhaustivo creado como parte de PlaNYC sobre la calidad del aire en las calles de los cinco condados.  Cada día, un cuarto de millón de transeúntes entra a Times Square y puede beneficiarse del aire más limpio.  Tras la creación de las plazas peatonales, la concentración de contaminantes asociados con el tránsito fue sustancialmente más baja que en mediciones del año anterior, y hubo menos que en otros lugares del Midtown.

“Creamos plazas peatonales justo en el corazón de nuestra Ciudad para enmendar algunos de los puntos de congestionamiento en nuestra red vial y para ayudar al tránsito a avanzar con más fluidez y rapidez por el Midtown”, dijo el alcalde Bloomberg.  “También esperábamos que al reducir la cantidad de vehículos en y cerca de Times Square mejoraríamos la calidad del aire en el área, y eso es exactamente lo que las cifras muestran ahora.  PlaNYC ha sentado las bases para mejorar la calidad del aire para todos los neoyorquinos — donde viven y donde trabajan — a la vez que se mejora la seguridad de los transeúntes y se aumentan los espacios públicos”.

El Estudio del aire en comunidades de la Ciudad de Nueva York es uno de más de una docena de programas de PlaNYC diseñados para mejorar la calidad del aire en la Ciudad.  El Departamento de Salud, en colaboración con el Centro para la Biología de Sistemas Naturales de Queens College, Universidad de la Ciudad de Nueva York (CUNY, en inglés), está recolectando muestras de aire en 150 ubicaciones de toda la ciudad.  En cada estación del año, un monitor en cada lugar recolecta muestras de contaminantes del aire en un período de dos semanas.  Las muestras son analizadas en busca de partículas finas (PM2.5), carbono en forma elemental (EC) y otros elementos en partículas contaminantes, óxidos de nitrógeno (NO2 y NO), dióxido de azufre (SO2) en los meses de invierno, y ozono (O3) en el verano.  Los resultados de las muestras de cada ubicación fueron analizados buscando correlación estadística con docenas de factores del uso de suelos, incluso la densidad de calderas de edificios y tránsito de camiones, y los resultados fueron proyectados hacia otras ubicaciones para crear mapas de la calidad de aire para toda la ciudad.  Reportes previos han mostrado la polución del aire causada por el uso de calderas que consumen gasóleo número 4 y número 6 para la calefacción en varios vecindarios.  Los riesgos para la salud del uso de estos combustibles con alto contenido de azufre han llevado a que las leyes estatales y locales exijan combustibles más limpios.  Los datos del estudio ayudarán a informar nuevas iniciativas para la calidad del aire en la próxima edición de PlaNYC, la cual será publicada el próximo día 21 de abril.

“La calidad del aire en general de la Ciudad de Nueva York ha mejorado en décadas recientes, pero los niveles de contaminantes aún son demasiado altos”, dijo el comisionado Farley.  “El Estudio del aire en comunidades de la Ciudad de Nueva York provee un reporte sobre el estatus de la calidad del aire mientras que el análisis separado del impacto de salud se enfoca en las vidas que pueden ser salvadas y hospitalizaciones evitadas si seguimos reduciendo la polución del aire.  Este análisis muestra que incluso pequeñas mejorías en la calidad del aire pueden producir grandes mejoras en la salud para todos los neoyorquinos”.

“El nuevo Times Square es un escenario que muestra la vitalidad y energía de Nueva York, en vez de congestión y contaminación”, dijo la comisionada Sadik-Khan.  “Los cambios aquí han sido grandes victorias para la seguridad, la movilidad y los negocios.  Ahora podemos ver que, de la misma manera, han producido grandes avances medioambientales”.

“El Estudio del aire en comunidades y sus interesantes hallazgos muestran cómo PlaNYC puede aplicar buena data en todas las disciplinas — en este caso el monitoreo de la calidad del aire, la planificación del transporte, y la salud pública — para mejorar la calidad de vida de los neoyorquinos”, dijo David Bragdon, director de la Oficina de la Alcaldía para Planificación y Sustentabilidad a Largo Plazo de la Alcaldía (Office of Long Term Planning and Sustainability, en inglés).  “Anunciaremos mejoras adicionales a la medición de la calidad del aire y otras nuevas secciones a nuestra agenda de sustentabilidad en el relanzamiento de PlaNYC la semana entrante”.

El reporte NYCCAS que acaba de ser publicado confirma que granes fuentes de contaminantes del aire generados en la Ciudad de Nueva York son producto del tránsito vehicular y edificios que queman gasóleo para calefacción con altos niveles de azufre.  Además, en Times Square, las concentraciones de oxido de nitrógeno (NO) y dióxido de nitrógeno (NO2), dos contaminantes asociados estrechamente con el tránsito, fueron unos de los más altos en la ciudad.  Tras la conversión a una plaza peatonal, los niveles de contaminación de NO en Times Square se redujeron en 63 por ciento, mientras que los niveles de NO2 se redujeron en 41 por ciento.  Véase la gráfica siguiente: concentraciones de óxidos de nitrógeno en el contador ubicado en Times Square cayeron después de la conversión a una plaza peatonal.

El estudio del impacto de la contaminación del aire sobre la salud, realizado por el Departamento de Salud, calcula el daño causado por la contaminación del aire en la salud de los neoyorquinos, enfocándose en dos contaminantes comunes del aire — partículas finas (PM2.5) y ozono (O3).  Ambos contaminantes están entre los peligros ambientales más analizados, se encuentran en el aire de la Ciudad de Nueva York en concentraciones por encima de los estándares de aire limpio, y se sabe que afectan adversamente la salud en niveles presentes en la ciudad.  Pueden irritar los pulmones, empeorar el asma y enfisema, e incrementar el riesgo de ataques cardíacos y muerte prematura.  Las personas de edad avanzada y niños pequeños podrían ser especialmente vulnerables a la contaminación del aire, pero esta afecta a todos.  El Departamento de Salud estima que la contaminación de PM2.5 en la Ciudad de Nueva York causa anualmente la muerte prematura de 3,200 personas, 1,200 hospitalizaciones por aflicciones respiratorias, 900 hospitalizaciones cardiovasculares, y 2,400 visitas de niños y 3,600 de adultos a departamentos de urgencias a causa del asma.  Los niveles de ozono son responsables cada año por aproximadamente 400 muertes prematuras, 400 hospitalizaciones respiratorias, 450 admisiones por asma, 1,800 visitas de niños y 2,900 de adultos a salas de emergencia debido al asma.  El estudio muestra como aun medidas moderadas que indican una mejora en el aire podrían reducir significativamente estos problemas de salud.  Alcanzar la meta de sustentabilidad  integral de PlanNYC de niveles PM2.5 que sean los más bajos entre las ciudades grandes del país prevendría 760 muertes, 500 hospitalizaciones y 1,400 visitas a salas de emergencias anuales.  Incluso una mejora más modesta de 10 por ciento en los niveles actuales prevendría casi la mitad de los incidentes adversos a la salud (350 muertes, 230 hospitalizaciones y 660 visitas a las salas de emergencia al año).







CONTACTO PARA LOS MEDIOS:


Stu Loeser / Jason Post   (212) 788-2958

Susan Craig/ Zoe Tobin   (Department of Health)
(212) 788-5290

Seth Solomonow   (Department of Transportation)
(212) 839-4850




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