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Hepatitis A

Aumento reciente de casos de hepatitis A entre hombres que tienen relaciones sexuales con hombres

Recientemente ha habido un aumento de casos de hepatitis A en la ciudad de Nueva York entre los hombres gais, bisexuales y otros hombres que tienen relaciones sexuales con hombres. La hepatitis A se puede prevenir con una vacuna segura y eficaz.

Si usted es un hombre que tiene relaciones sexuales con hombres y desea recibir una vacuna gratuita o de bajo costo contra la hepatitis A, visite una de nuestras clínicas de bienestar sexual o la clínica de vacunación en Fort Greene. Para encontrar otras ubicaciones, visite el mapa de salud de NYC.


La hepatitis A es una enfermedad provocada por un virus que infecta el hígado y puede dañarlo. Por lo general, se transmite de una persona a otra a través de alimentos o agua contaminados, o por contacto sexual. La hepatitis A puede conducir, a veces, a la hospitalización. En casos poco comunes, puede provocar afecciones del hígado graves o la muerte.

Usted puede prevenir la infección vacunándose y lavándose las manos regularmente con jabón.

Si cree que puede tener hepatitis A, su médico puede comprobarlo mediante un análisis de sangre.

Prevención y cuidado

El virus de la hepatitis A ingresa al cuerpo a través de la boca y pasa a la materia fecal (heces).
El virus puede quedar en las manos de una persona infectada y contagiarse a través del contacto directo e indirecto, como por ejemplo al consumir alimentos que fueron manipulados por una persona infectada. La hepatitis A también se puede transmitir a través de la exposición a las heces durante la actividad sexual.

Las personas infectadas tienen más probabilidades de propagar el virus durante las dos semanas anteriores a la aparición de los síntomas y durante la primera semana con los síntomas.

Prevención

Usted puede prevenir la infección y la transmisión de la hepatitis A si:

  • Se vacuna.
  • Se lava las manos con jabón a menudo, especialmente después de usar el baño o cambiar pañales.
  • Evita prácticas sexuales que pueden resultar en una exposición de las manos o la boca a las heces (los condones pueden prevenir otras infecciones de transmisión sexual, incluyendo el VIH, pero puede que no prevengan la hepatitis A).
  • Utiliza agua embotellada o agua de la llave y la hierve durante un minuto si se encuentra en un país donde la hepatitis A es común, incluyendo países del Caribe, América Central y del Sur, África, Europa del Este y partes de Asia. Además, evita comer mariscos que pueden provenir de una fuente de agua contaminada en dichos países.

Vacunación

Para una protección duradera contra la hepatitis A, debe recibir dos dosis de la vacuna en un intervalo mínimo de seis meses.

Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC, por sus siglas en inglés) de los Estados Unidos recomiendan la vacunación rutinaria contra la hepatitis A de todos los niños de uno a dos años de edad. En la ciudad de Nueva York, todos los niños y adolescentes que no hayan sido vacunados previamente deben recibir las dos dosis de la vacuna contra la hepatitis A antes de cumplir 19 años de edad para estar protegidos de por vida. Además, usted debe vacunarse si:

  • Viaja a un país con una tasa alta de hepatitis A. Esto incluye países en el Caribe, América Central y del Sur, África, Europa del Este y partes de Asia. Usted estará mejor protegido si recibe la primera dosis al menos un mes antes de viajar, pero la vacuna también le proporcionará protección si la recibe dos semanas antes de viajar.
  • Trabaja con el virus de la hepatitis A en un laboratorio.
  • Es un hombre y tiene relaciones sexuales con hombres.
  • Tiene una enfermedad crónica del hígado.
  • Consume drogas inyectables o no inyectables.
  • Tiene un trastorno de la coagulación.
  • Vive en la calle, en un refugio para personas sin hogar o no tiene una dirección permanente.

También debería considerar vacunarse si hay un brote de la infección en su comunidad.

Los estudios no han encontrado un mayor riesgo de hepatitis A para las personas que trabajan en ciertas industrias específicas, incluyendo el servicio de alimentos, la atención de salud y el cuidado infantil. Sin embargo, el tipo de trabajo que se realiza en estas industrias aumenta el riesgo de que los trabajadores transmitan la hepatitis A a las personas que atienden. Los trabajadores de estas industrias deben considerar vacunarse para reducir este riesgo, especialmente si se encuentran en una comunidad que está sufriendo un brote.

Si cree que debería vacunarse, consulte a su médico o visite una clínica de inmunización del Departamento de Salud.

Síntomas

Los síntomas de la hepatitis A pueden aparecer entre dos y siete semanas después de la exposición. La mayoría de las personas comienzan a sentir síntomas un mes después de haber estado expuestas, incluyendo:

  • Ictericia (coloración amarilla de los ojos y la piel)
  • Fatiga
  • Dolor abdominal
  • Náuseas
  • Diarrea

No todas las personas infectadas manifestarán todos estos síntomas.

Los síntomas pueden volverse graves y llevar a la hospitalización o la muerte, pero la mayoría de las personas mejoran en unas pocas semanas. Menos del 1 % de los casos resultan en muertes. Las personas que tienen una enfermedad crónica del hígado o un sistema inmunitario debilitado corren un mayor riesgo de padecer una enfermedad grave.

Los bebés y los niños pequeños en general presentan síntomas muy leves y tienen menos probabilidades de desarrollar ictericia que los niños más grandes y los adultos.

Tratamiento

No hay tratamiento para la hepatitis A una vez que aparecen los síntomas, pero la mayoría de las personas se recuperan por completo y por sí solas si descansan y evitan el consumo de bebidas alcohólicas. Las personas con hepatitis A también deben evitar tomar medicamentos que puedan dañar su hígado, como el paracetamol o Tylenol.

Si tuvo hepatitis A y se recuperó de la enfermedad, ahora es inmune y nunca más podrá volver a infectarse ni transmitir el virus.

Recursos adicionales en español

Más información en inglés