“Los cimientos de este Departamento están más fuertes que nunca debido a la labor extraordinaria de estos empleados”, dijo el comisionado LiMandri.  “Con un proceso racionalizado que se base en nuevas tecnologías, se están aprobando proyectos de construcción más rápido que nunca, impulsando el crecimiento económico de la Ciudad de Nueva York como nunca antes.  Tras el huracán Sandy, nuestro abnegado personal realizó más de 80,000 inspecciones y asesoró a cientos de dueños de propiedades cómo reconstruir sus hogares más fuertes y más seguros.  Nuestros expertos en ingeniería, arquitectura y construcción han hecho de esta agencia un líder mundial en seguridad y desarrollo de la construcción, y como resultado, la Ciudad es un lugar mejor para vivir, trabajar y construir”.

La ceremonia de premios fue establecida bajo el comisionado LiMandri en el año 2010 para reconocer la labor extraordinaria de los 1,000 empleados del Departamento.  El año pasado, el Departamento revisó más de 446,000 juegos de planos de construcción y emitió 146,000 permisos, generando $12.2 mil millones en posible actividad económica.  Los inspectores también completaron 281,301 inspecciones y emitieron 49,958 infracciones y 5,130 Órdenes de cese de obras.

Tras el huracán Sandy, el Departamento supervisó inspecciones en 80,000 edificios por toda la ciudad, con ayuda de firmas privadas de ingeniería y la Guardia Nacional, colocando etiquetas rojas, amarillas o verdes en las propiedades afectadas para avisar a los residentes y socorristas de las condiciones estructurales. Empleados también trabajaron en los Centros de restauración de la Ciudad en Brooklyn, Queens, el Bronx y Staten Island, ayudando a los residentes a recibir servicios eléctricos y de plomería de emergencia, a programar reparaciones del hogar y a entender los pasos necesarios para reocupar sus hogares.

El Premio de Promoción de la seguridad pública (Advancing Public Safety Award, en inglés) fue entregado a un equipo de 18 inspectores e ingenieros que respondieron a la grúa-torre dañada en el 157 de la calle West 57th en Manhattan y ayudaron a asegurar el brazo desplomado después de Sandy.  Poco después del colapso de la estructura, el subcomisionado ingeniero Michael Alacha y el subcomisionado interino ingeniero Timothy Lynch subieron a la cima del edificio de 74 pisos para inspeccionar el brazo de la grúa, que se inclinó hacia atrás por los vientos de 80 millas por hora y estaba colgado a casi 1,000 pies de altura.  En los días siguientes, ambos profesionales, junto con el director ejecutivo de Grúas y la División de Cabrías ingeniero Faisal Muhammed, el inspector en jefe Frank Damiani y otros, condujeron varias inspecciones de la grúa, el montacargas y los edificios contiguos como precaución.  El equipo trabajó con el contratista y promotor para crear un plan a fin de asegurar el equipo, y la operación fue completada cinco días más tarde, permitiendo a los residentes del área volver a sus hogares y la reapertura de negocios.

El Premio de Innovaciones en operaciones y desarrollo de condados (Innovations in Borough Operations and Development, en inglés) fue concedido a Lisa Fan, directora del Centro de Desarrollo de la Ciudad (NYC Development Hub, en inglés).  La directora Fan supervisa las operaciones diarias del Centro, una moderna oficina de revisión de proyectos que acepta planos digitales de construcción y coordina todos los permisos en línea.  En el Centro sito en el Bajo Manhattan, Fan implementó un nuevo sistema de rastreo para monitorear el progreso de las revisiones de planos incrementar la eficiencia en las aprobaciones de proyectos.  En su primer año, el Centro de Desarrollo aprobó proyectos hasta tres veces más rápidamente que los presentados en forma impresa en las oficinas de los condados.