“La cuarta pieza ante mí hoy es la Ley Preliminar Número 660-A, patrocinada por los concejales Garodnick, Comrie, Méndez, Mark-Viverito, Barron, Brewer, Fidler, Gennaro, Gentile, Gerson, González, Jackson, James, Koppell, Liu, Martínez, Nelson, Palma, White, Seabrook, Avella, Recchia, Vann, Sears, Báez, Eugene, Sanders y Weprin.  La Ley Preliminar Número 660-A amplía la autoridad de las agencias de cobros para incluir a los compradores de deudas delincuentes que buscan cobrar dichas deudas, entre otras cosas, presentando demandas legales.

“El Departamento de Asuntos al Consumidor (DCA, en inglés) recibe más quejas sobre abuso de las agencias de cobros que cualquier otro asunto.  Cualquiera que busque cobrar una deuda de un neoyorquino ya requiere tener una licencia del DCA, que dedica recursos sustanciales para proteger a los consumidores de prácticas ilegales e injustas.  Con la aprobación de esta legislación, el DCA estará armado con aun más herramientas para asegurar que los cobradores de deudas sean responsabilizados de cumplir con los neoyorquinos.

“Bajo esta legislación, a las agencias de cobro de deudas se les requerirá ahora adherirse a pautas de sentido común que regulen su interacción con los neoyorquinos.  Las que hacen llamadas o envían para cobrar deudas tendrán que decir al deudor quién llama y de cuál agencia, el  acreedor original, el monto de la deuda, y el nombre y teléfono de una persona a la que el acreedor pueda llamar.  Cualquier persona contactada por una agencia de cobros podrá ahora exigir documentación escrita sobre el estatus e historia de la deuda.

“Quiero agradecer a Jonathan Mintz, comisionado del DCA, y a su personal por su labor en esta pieza.  También quiero agradecer al Concejo por aprobar esta legislación”.