El alcalde Michael R. Bloomberg, el comisionado del Departamento de Sanidad Pública (DSNY, en inglés) John J. Doherty y el presidente de la Corporación de Desarrollo Económico de la Ciudad (NYCEDC, en inglés) Andrew Alper anunciaron hoy un acuerdo con Hugo Neu Corporation (HNC), una de las más grandes empresas procesadoras de residuos de metales en la nación, que asegurará una válvula de escape a largo plazo con factibilidad económica para los productos reciclables de la Ciudad de Nueva York y reducirá drásticamente el tránsito de camiones en calles de la Ciudad.  El convenio de hoy con HNC requiere que la compañía construya una moderna instalación para el reciclaje con el entendimiento de que la Ciudad se comprometerá a entregar todo el metal, vidrio y plástico, y una porción del papel mezclado que el Departamento de Sanidad Pública recoge actualmente mediante su programa de reciclaje en las aceras de zonas residenciales por los próximos 20 años.  Durante el anuncio, que se llevó a cabo en la Terminal Marítima del Sur de Brooklyn (Marine Terminal), acompañaron al alcalde el concejal Michael McMahon; John Neu, presidente de la junta directiva de la corporación Hugo Neu; y Mark A. Izeman, abogado principal del Concejo de Defensa de Recursos Naturales (Natural Resources Defense Council o NRDC, en inglés) .

“Hace tres años, el programa municipal de reciclaje estaba averiado”, dijo el alcalde Bloomberg.  “Los costos crecían fuera de control y, aunque los neoyorquinos separaban concienzudamente sus materiales reciclables, nadie lo quería.  Suspendimos el programa para que pudiéramos crear un programa mejor, más rentable y más respetuoso del medio ambiente.  Me enorgullece anunciar que estamos entrando en una nueva era para el reciclaje en la Ciudad de Nueva York.  Este contrato a largo plazo permite a HNC realizar la inversión de capital necesaria a fin de desarrollar mejores mercados para los materiales reciclables de la Ciudad, y usaremos nuestra red de vías fluviales para transportar nuestros reciclables por toda nuestra ciudad, sacando camiones de nuestros caminos”.

La construcción de la instalación de $25 millones creará 160 empleos de construcción y 100 empleos permanentes.  Se espera que la construcción empiece a principios de 2006 y sea completada a finales de 2007, y será financiada por HNC.  El contrato a largo plazo reducirá el costo para la Ciudad de procesar el reciclaje de metales, vidrio y plástico a $48 por tonelada, $59 menos por cada tonelada que los $107 que la Ciudad pagaba antes de que el programa fuera suspendido hace dos años.  El contrato costará a la Ciudad unos $16 millones anuales, ahorrando casi $20 millones al año a comparación con la que había pagado antes de la suspensión del programa de reciclaje.  Un total de 85% de los materiales reciclables serán llevados a la nueva instalación en barcazas, y tras su procesamiento, 75% saldrá de la planta en barcazas, reduciendo el tránsito de camiones en calles locales y mejorando el medio ambiente.  Al apoyarse en el transporte por agua, la instalación reducirá el tránsito de camiones en 55,000 millas anuales.

“El día de hoy marca la culminación del proceso de maduración del reciclaje como un servicio público en la Ciudad de Nueva York”, dijo el comisionado Doherty.  “El reciclaje, que empezó como un movimiento comunitario esporádico en los años ’60 y ’70, ha madurado hasta convertirse en una industria viable para la Ciudad.  Al completar la planta de Hugo Neu, la infraestructura necesaria para procesar el caudal de productos reciclables de la Ciudad estará completa, permitiendo el flujo continuo de reciclables consumidos desde hogares individuales hasta los vehículos de recolección de sanidad pública y hasta su procesamiento en esta nueva instalación, y de vuelta como materias primas recobradas para hacer nuevos productos”.

“La ampliación de Hugo Neu en el litoral del sur de Brooklyn es un ejemplo perfecto de cómo la estrategia de desarrollo económico del alcalde Bloomberg para los cinco condados está funcionando”, dijo el presidente Alper.  “Este acuerdo no solo traerá empleos e inversión a Brooklyn; también mejorará el medio ambiente, ampliará el litoral industrial-comercial y ayudará a diversificar nuestra economía al ampliar el sector de manufactura en la Ciudad de Nueva York”.

“Además de los claros beneficios ambientales y económicos, creemos que este contrato a 20 años nos dará la oportunidad de desarrollar nuevos mercados para el plástico y el vidrio tanto aquí en la Ciudad de Nueva York como en lugares del mundo entero”, dijo John Neu.  “Esperamos colaborar con la Ciudad y diversas organizaciones ambientales en educación y otras gestiones, lo cual incrementará la tasa de reciclaje, reducirá la contaminación y el torrente de basura.  Creemos que este tipo de compromiso a largo plazo asegurará la viabilidad económica del reciclaje”.

“Damos la bienvenida a la corporación Hugo Neu al convertirse en parte de la gestión en curso para construir y restablecer el desarrollo económico en Sunset Park”, dijo el concejal González.  “Esta instalación creará una manera eficaz de reciclar materiales y promover la oportunidad laboral mientras que damos el paso inicial para traer el crecimiento económico de vuelta a la costa de Sunset Park”.

“El alcalde merece reconocimiento por forjar un acuerdo a largo plazo que combina una política ambiental buena con un buen sentido de los negocios”, dijo Mark A. Izeman.  “Esta es la reforma económica más significativa al programa de reciclaje de Nueva York en casi una década, y ayudará a garantizar que el reciclaje ahorre dinero a la Ciudad.  Este acuerdo de reciclaje es un gigantesco paso de avance por parte del alcalde en la búsqueda de soluciones para el irritante problema de los desechos sólidos”.

La nueva planta estará ubicada en un muelle en la Terminal Marítima del Sur de Brooklyn, y será parte de un desarrollo mayor lanzado por la Corporación de Desarrollo Económico para este lugar en el litoral.  Debido a que HNC exportará materiales de reciclaje en contenedores, la nueva instalación sustentará una operación de estibadores, que también ha sido planificada para el lugar.  Estas actividades representan colectivamente un desarrollo mayor para un litoral industrial-comercial en Brooklyn.